Pensamientos Agustinianos Mi carne es mi jumento, yo camino hacia Jerusalén, y muchas veces me lleva precipitadamente e intenta arrojarme fuera del camino, pues mi camino es Cristo; ¿no voy a reprimir con el ayuno al que va encabritado? (Ua 1,3) # Enviar por correo electrónicoEscribe un blogCompartir en XCompartir con Facebook
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